En algunas ocasiones, hay personas que mantienen la relación que tienen más por costumbre que por otra cosa. Tal vez porque les da reparo acabar con la relación, o puede que sea porque se han acomodado con esa situación, el caso es que continúan con la pareja aunque ya no quede amor.
Si éste es tu caso, un consejo: mejor termina con todo. No se puede aguantar mucho tiempo esta situación, y tampoco es justo para ninguna de las dos partes. Tú estarás incómodo/a porque ya no quieres hacer las mismas cosas con esa persona, y él o ella estarán viviendo un espejismo que poco a poco se irá convirtiendo en una pequeña tortura, que terminará con la caída total de su autoestima.
Aprovecha antes de que todo empiece a ser incómodo, antes de que el amor de paso a las discusiones continuas, las malas caras y la dejadez, y confiesa a tu pareja que la relación ya no tiene sentido para ti. Exponle tus circunstancias, y hazle entender que no tiene sentido continuar con ello. Pero nunca intentes evitar la situación de la ruptura con el típico "necesito tiempo". Sé justo/a contigo y con la otra parte, y no le des falsas esperanzas que sólo llevarán al final de cualquier tipo de relación entre los dos.
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